OpenAI ha lanzado Sora, una innovadora herramienta de creación de vídeo basada en inteligencia artificial. Sora permite generar clips de vídeo simplemente proporcionando una descripción textual de lo que se desea ver en pantalla. Los resultados varían en calidad y estilo, desde realistas hasta con un toque de videojuego, pero en general, sorprenden por su creatividad.
Sam Altman, CEO de OpenAI, anunció el lanzamiento en la red social X, generando una oleada de nuevas creaciones. Los vídeos generados abarcan desde escenas realistas hasta futuristas y alocadas, abarcando diversos estilos y temáticas. Sora puede producir vídeos completos de una sola vez o extender vídeos existentes para hacerlos más largos.
En las demostraciones realizadas por Altman, se mostraron escenas complejas con múltiples personajes y detalles precisos, destacando la capacidad del modelo para comprender y simular el mundo físico en movimiento. Sora no solo interpreta las solicitudes del usuario, sino que también tiene un profundo conocimiento del lenguaje, generando personajes convincentes con emociones vibrantes.
Altman invitó a los seguidores a hacer sugerencias para nuevos vídeos, y el modelo puede manejar instrucciones detalladas o más generales. Además de crear vídeos a partir de descripciones, Sora puede animar imágenes fijas existentes con precisión y generar vídeos a partir de videos ya existentes, llenando fotogramas faltantes.
OpenAI ha puesto la herramienta a disposición de equipos de evaluación (equipos rojos) y de artistas visuales para recopilar feedback. Aunque Sora tiene algunos fallos notables, como dificultades para simular con precisión la física de una escena compleja, OpenAI está tomando precauciones antes de lanzarla públicamente. Estas precauciones incluyen la evaluación de los equipos rojos, la implementación de detectores de contenido generado por Sora y el uso de clasificadores de imágenes para revisar los vídeos generados y garantizar el cumplimiento de las políticas de uso.
OpenAI destaca la importancia de aprender de la utilización en el mundo real para mejorar la seguridad de los sistemas de inteligencia artificial a medida que evolucionan.